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Coronavirus: Me detengo, reflexiono, aprendo y valoro.

En medio de hacer un break y seguir analizando las diferentes decisiones que van tomando los gobiernos de nuestros pueblos, sigo acá, trabajando (desde casa, por si acaso) tratando de mantener la mente ocupada, buscando poner al día asuntos pendientes… enfocándome en ver alrededor y obtener información de crecimiento a partir de los sucesos.

Ayer anunciaron en el país la suspensión de las actividades escolares para la escuela privada (la que si venía buscando la manera de acompañar a los niños) y esto ha sido como un golpe bajo que me tiene el piso movido porque no sólo las niñas se afectan; todo se afecta, sin embargo, mientras intento inhalar para llenar mi mente y mi corazón de esperanza, decido sacar aprendizajes de esta decisión y empiezo a plasmar, porque para  mí, es mucho lo que ésto y el tema coronavirus en general, nos puede enseñar.

Parte de las ideas que llegan a mi mente:

  • La gerencia en el hogar somos los padres, así como la gerencia de los pueblos son los gobiernos.
  • Cuando los padres tomamos decisiones a la ligera, así como los gobiernos las toman, se desestabilizan las emociones de los hijos, así como la seguridad de los ciudadanos.
  • Hay cosas que no podemos cambiar, pero siempre podremos aprovecharlas para hacernos mejores personas.
  • En este mundo TODOS somos importantes y tenemos un lugar necesario para el otro… desde los padres que velan por los hijos, los maestros que refuerzan la labor de enseñanza, los doctores que cuidan la salud de la humanidad, como hasta los que recogen la basura aún en medio de la pandemia, cuando deberían también permanecer en casa resguardandose a sí mismos y sus familias.
  • Toda situación de crisis te ofrece dos alternativas y sólo tú eliges en libertad: te quedas parado mientras todo pasa o tomas acción y te enfocas en el aprendizaje que sacarás de esta situación.
  • La gran piedra de tranca del ser humano; su inconformidad para con todas las cosas.

“La primera escuela de los hijos es la familia”

  • Los más grandes maestros de los hijos somos los padres.
  • La escuela y el hogar: equipo perfecto para el desarrollo integral de los hijos.
  • Para educar no necesitamos escuelas físicas. Hay maestros con deseos de enseñar y acompañar y familias necesitando ese servicio. Qué puede detenernos?
  • Para tu tranquilidad, si confías en esto que te digo, tómalo!. Los contenidos académicos son secuenciales tanto en primaria como en secundaria… es decir, SIEMPRE se ven y responden a una secuencia. Se ve sumas desde primaria hasta secundaria… se dan los elementos de la comunicación año tras año. Así es!. Nuestros niños aprenden sólo por repetición…sigamos trabajando lo mismo. Ya los maestros se encargaran de los nuevos contenidos.
  • Los maestros no sólo enseñan sumas, restas, fracciones y lectura. Animan, apoyan  y acompañan. Esto hace un maestro con vocación de servicio.
  • Tanto padres y maestros cuidamos emociones. El momento es hoy!
  • Potencias en educación? Qué podemos replicar desde casa?. No precisamente desarrollan 7 horas de escuela y full tareas para refuerzo académico.

¡Es tiempo de empoderarnos como padres!

Conocer más a nuestros hijos y acercarnos a ellos. No sólo ver sus conductas (la punta del iceberg) sino sus emociones y necesidades (lo que está bajo el agua). Mira cómo se comunica, cómo escribe, cuánto se conoce, cómo están sus hábitos, su postura al escribir, su atención, su capacidad para ser empático y ayudar cuando se necesita de él… PODEMOS HACER TANTO COMO PADRES! Esta es la oportunidad perfecta!.

Recuerda… prevalece aquello que trasciende. Los contenidos de la escuela si son importantes, pero no lo son todo. La suspensión de actividades escolares y la suspensión general de nuestras rutinas son un momento mágico y ÚNICO para mirarnos, leer juntos, orar en familia, meditar, desempolvar los juegos de mesa, hacer arte, cocinar, hacer conciencia de la respiración; de qué nos hace daño del otro y cómo hacemos daño al otro, de crear, de inventar, de bañarnos bajo la lluvia, de sembrar una planta o darle cariño al jardín, de retomar cosas pendientes, de colaborarnos todos en casa!. Con esto no aprenderemos divisiones, restas o raíz cuadrada, pero fortaleceremos la conexión entre nosotros, construimos memoria, retomaremos el cumplimiento de reglas y espera de turnos, tendremos mejor consciencia corporal, cuidaremos de nuestro cuerpo y de las emociones del otro, retomaremos el valor de trabajar en equipo, nos escucharemos, nos colaboraremos, aprenderemos a optimizar el tiempo y a cumplir metas, cuidaremos el entorno, haremos cosas de niños y sabremos valorar el tesoro más importante que poseemos: la esencia… es tiempo de SER!

Es tanto lo que he pensado, pero ya me pasé de la cuartilla establecida. Da igual… es momento poder pasarse de esas normas cuando de soltar se trata!. Esto lo escribo por mi y para mí y para quién desee tomarlo en tiempo de cuarentena; en días sin escuela.

Lo tomas o lo dejas; sólo tú lo decides. No pasa nada porque es sólo mi apreciación del tema y de la situación. Te invito a que busques la tuya. A que hagas conciencia de la oportunidad que esto te brinda a tí y a tu familia.

A tí quién llegaste hasta aquí; papá y mamá de tu hogar: GRACIAS por leer… te abrazo desde casa; en tiempos de detenernos.

Con cariño y respeto.

Luiza (esposa, mamá, resiliente y educadora)

¡Hola, soy Luizandra!

¡Qué alegría que estés dando el paso para convertir tus retos de ser familia en una oportunidad para crecer! 

Este blog está creado para apoyar a todos los padres y familias en sus retos del día a día, sin importar la magnitud de los mismos.

No más quejas,  drama ni frustración. ¡Tomemos acción!

Siempre hay esperanza y propósitos detrás de esta situación que estás viviendo.

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